Corbins fue durante 40 años el frente de la guerra entre cristianos y musulmanes por encontrarse en un punto medio entre
Lleida y Balaguer. Por aquel entonces, el término de Corbins abarcaba mucho más territorio que el actual y se convertía en un punto estratégico, ya que desde Corbins y Castelldans se podía ver hasta el Pilar de
Almenara.
Ramon Berenguer III fue el encargado de la reconquista de las tierras de Corbins, quedándose con una tercera parte el conde de
Barcelona y dos terceras partes por los Anglesola.
En 1143 Ramon Berenguer III entregó una tercera parte de su tercio a los
Templarios , los cuales fueron ganando poder hasta formar un pedido a Corbins.
La parte antigua de Corbins corresponde a la zona de enfrente del antiguo castillo templario y, a pesar de no poder contemplarse en la actualidad, las excavaciones revelaron que había habido una
muralla que protegía el casco antiguo. También, en lo alto del pueblo quedan los restos de lo que la gente dice que es la
Cárcel del Pedro , lo que se piensa es una parte del antiguo castillo árabe.
El pueblo antiguo de Corbins quedó deshabitado por ser una línea de batalla entre moros y cristianos y, por este motivo, posteriormente, se construyó una nueva villa a los pies de la colina con una nueva plaza y una calle mayor.
Se puede visitar la
Iglesia Parroquial que data de 1637, aunque si te fijas bien, verás que hay otra piedra en la fachada con el año 1635. Su campanario es tardío. Al lado de la iglesia, puedes atenerte al
mirador del Fossat Vell , una plaza construida sobre el antiguo cementerio y bajo la cual, en el centro, se enterraron los huesos que se encontraron.
Puedes identificar las casas parroquiales de
cal Quira en la calle La Creu,
cal Maciano en la calle mayor y
cal Fraret en la calle del Riu. También, está
Cal Comte , una antigua casa a pie de la vieja carretera, donde comienza la calle de la Creu, que fue propiedad de la condesa de Tàrrega y el conde de Urgell, que se trasladaron por temas de salud.
Destacamos también la
capillita de la Roca , unos restos del antiguo poblado íbero incrustados en la superficie de una roca y ubicados junto a la carretera C-12 ya unos 500 metros del municipio.