Casas rurales en la Figuera

En sus inicios, la Figuera estuvo dominación árabe. En 1148 fue conquistada por Ramon Berenguer IV. Posteriormente, pasó a manos de la baronía episcopal de Cabacés. Si paseas por el centro histórico encontrarás calles estrechas y empinadas. Uno de los edificios más emblemáticos de la población es la iglesia parroquial de Sant Martí. Data del siglo XVIII, tiene tres naves y un campanario adosado.

Por todo el municipio de la Figuera hay muchas bodegas que están adscritas a la DO Montsant. Puedes aprovechar para realizar una ruta enológica y ver cómo es todo el proceso de elaboración del vino. Por el camino también te encontrarás con fincas que se encargan de producir aceite de DO Siurana.

El observatorio de La Figuera fue utilizado por parte del ejército republicano durante la batalla del Ebro. Esto se debe a que era un punto estratégico debido a que se pueden ver hasta cuarenta kilómetros del río Ebro. Actualmente, este espacio histórico se encuentra en buen estado de conservación.

El entorno natural que rodea la Figuera combina sierras, valles y barrancos. De esta forma es perfecto para la práctica de deportes de aventura como el parapente, la escalada o la espeleología. También tienes numerosas rutas senderistas. Una de las más conocidas es la que va hasta el collado de la Solana. Este lugar es conocido como el Balcón del Priorat, debido a que puedes ver los pueblos de alrededor y el río Montsant.