Casas rurales en Vall-llobrega

¿Qué puedo hacer en Vall-llobrega y en sus casas rurales?

Si desea disfrutar de la tranquilidad de un pueblo situado en las estribaciones del macizo de las Gavarres con un patrimonio paisajístico y arquitectónico que vale la pena ver, no deje de visitar este bonito municipio formado por los núcleos de Vall-llobrega, el Raval de Baix, el Raval de Dalt y la urbanización de Mas Falquet.

La historia de Vall-llobrega y su entorno

Los orígenes del municipio pueden remontarse, gracias a los vestigios arquitectónicos, a la época romana y demuestran la ocupación entre los siglos I y el VI. El primer documento donde se menciona Valle Lubrica, es un documento del rey franco Lotari, de 968, dirigido al abad del monasterio de Sant Feliu de Guíxols, al que pertenecía el pueblo. Vall-llobrega formó parte, más adelante, del condado de Palamós y de la alcaldía real de Palamós.

Qué hacer durante tu estancia en un alojamiento turístico de Vall-llobrega

Conocer su patrimonio arquitectónico

Los imprescindibles de Vall-llobrega son la antigua iglesia de Sant Mateu , templo románico del siglo XI, y la nueva, también llamada de Sant Mateu, y del siglo XVII ya la que llegará después de un bonito paseo por el Raval de Baix . Por cierto, en la plaza de la villa no se puede perder el impresionante eucalipto centenario situado junto al ayuntamiento. Vale la pena verlo.

Pasear por los alrededores del pueblo

Si lo que desea es conocer los alrededores, lo tiene fácil, Palafrugell está a escasos ocho kilómetros y tiene una oferta variada en restaurantes, comercios. Si se quiere adentrar en un barrio marinero de verdad, tiene muy cerca Calella de Palafrugell: su casco antiguo debe verlo. Y si quiere bañarse, no hay duda, las playas de Palamós, Mont-ras y Palafrugell las tiene cerca.