Casas rurales Granyena de Segarra

Las tierras de Granyena de Segarra pasaron a ser propiedad del conde de Barcelona , quien las cedió a doce matrimonios con el objetivo de poblar la zona. En ese momento. ya se mencionaba el castillo de Granyena , bajo el cual se empezó a configurar la villa. A lo largo de la historia, el castillo tuvo muchos señores y, finalmente, en 1130 Ramon Berenguer II lo dio a La Orden de los Templarios, quienes establecieron una fortaleza para preparar la conquista de Lleida. Una vez extinguidos éstos, pasó en manos de los hospitalarios .

Visitar Granyena de Segarra implica pasar por los escombros del castillo, que sufrió un deterioro importante a raíz de las guerras de Juan II, Sucesión y de los Segadors. El castillo data del s.XI y desde el monte se tienen unas vistas inmejorables de la comarca. Entre los escombros del castillo todavía puede apreciarse la estructura de algunas salas y pasillos.

Te aconsejamos que te pasees por la calle Mayor del pueblo y descubras entre las casas los vestigios de la Edad Media de la villa cerrada . Desde esa misma calle, una escalinata te conduce hasta la Iglesia Parroquial de Santa María, un imponente templo de estilo neoclásico del s.XVIII.

Pues por supuesto que puedes adentrarte en la historia medieval de la comarca haciendo la ruta de los castillos de la Segarra, pero también te animamos a dar el paseo que conduce a la Ermita Parroquial de Santa María del Camino , a pocos kilómetros del pueblo . Se trata de un templo, de estilo barroco sobre el románico, que ya aparece documentado en el s.XIII, con gran tradición de peregrinaje.