Casas rurales en Beuda

¿Qué puedo hacer en Beuda y en sus casas rurales?

La perfecta comunión entre naturaleza y arquitectura medieval. Es lo que encontraremos en Beuda, una pequeña población de la Garrotxa, recluida entre el macizo del Mont y el valle del Fluvià. Un lugar ideal para una estancia tranquila y rural.

La historia de Beuda y su entorno

La historia de Beuda está muy ligada a la del vizcondado de Bas, una de las jurisdicciones feudales del condado de Besalú, de la que formó parte. Y, de hecho, el castillo de Beuda pertenecía a los vizcondes hasta finales del siglo XIII. A partir de 1308 ya pasó a manos de Jaume de Besora, señor de Rocabruna. Un hecho curioso de la historia de Beuda es que el escritor Jacint Verdaguer habla de ello en su libro Excursiones y viajes como la primera donde se oyeron cantar las tradicionales caramelles.

Qué hacer durante tu estancia en un alojamiento turístico de Beuda

Conocer al pueblo y su patrimonio arquitectónico

Si pasa unos días en Beuda, ya puede apuntar unos cuantos imprescindibles: De entrada, los muros del antiguo castillo dels Moros , documentado antes del año 1000, la iglesia de Sant Feliu, un templo románico del siglo XI o el puente sobre el río Llierca , una destacada obra del románico catalán. También merece la pena que se acerque a Segueró a visitar Can Noguer , una de las fincas más importantes de Cataluña en los siglos XVIII y XIX. Justo debajo encontrará Santa Maria de Segueró , una iglesia románica construida en el siglo XI que tiene una sola nave, un peculiar ábside y una obra de fortificación en la fachada.

Realizar excursiones por los alrededores de Beuda

Si le gusta el senderismo, está de suerte. Si eres de caminar, puede acercarse al santuario de la Mare de Déu del Mont, un lugar simbólico para la cultura catalana. También puede optar por la ruta que va desde Beuda hasta Sant Miquel de Coma de Roure, o la ruta corta de la fuente de la Quera, que le permitirá contemplar la silueta del castillo de Beuda , muy peculiar. También vale la pena visitar las grutas de la cueva del Carlí.